Javier Ruiz Nochebuena
La inteligencia artificial (IA) está revolucionando la economía global, creando oportunidades de negocio con un potencial aún incalculable de forma precisa. Durante un reciente evento sobre mejores prácticas empresariales y excelencia operacional en Chile, discutí las múltiples oportunidades que la IA ya está generando y las que se vislumbran para el futuro, abriendo nuevos horizontes en los modelos de negocio.
Si bien muchos de los modelos tradicionales de suministro, producción y entrega continuarán evolucionando con la adopción de nuevas tecnologías, algunos negocios desaparecerán debido a la falta de agilidad y competitividad. Sin embargo, como siempre, surgirán nuevas oportunidades que solo podrán aprovechar quienes estén preparados para reconocerlas y adaptarse rápidamente.
Uno de los ejemplos más claros y ya en uso de cómo la IA puede transformar los negocios, es la creación de asistentes virtuales para la atención al cliente. Con su capacidad para comprender el lenguaje natural, la IA puede responder de manera rápida y eficiente a las preguntas de los clientes, reduciendo la necesidad de personal y mejorando notablemente la experiencia del usuario.
Otra área de impacto es la personalización de contenido para marketing y ventas. La IA tiene la capacidad de analizar grandes volúmenes de datos y crear contenido altamente personalizado, adaptado a las preferencias y comportamientos individuales de los clientes. Esto no solo aumenta la efectividad de las campañas publicitarias, sino que también mejora las tasas de conversión en ventas.
Un tercer ejemplo es el uso de la IA para desarrollar plataformas de recomendación de productos. Al analizar los patrones de comportamiento de los clientes, la IA puede sugerir productos que se ajusten mejor a sus necesidades, incrementando las ventas y optimizando la experiencia de compra.
Según un estudio del McKinsey Global Institute, la IA generativa tiene un inmenso potencial económico, con estimaciones que indican que podría generar entre 2.6 y 4.4 billones de dólares en ganancias corporativas anuales a nivel global en los próximos años. Este crecimiento se debe a que la IA aumenta significativamente la productividad en áreas clave como atención al cliente, creación de contenido para marketing y ventas, y el desarrollo de software a partir de indicaciones en lenguaje natural.
A pesar de las oportunidades que la IA generativa ofrece, su adopción también presenta retos. Los líderes empresariales deben ser conscientes de la necesidad de desarrollo de su personal en las habilidades necesarias para trabajar junto a la IA. No basta con implementar la tecnología; las organizaciones deben reevaluar sus procesos y determinar dónde la IA puede aportar el mayor valor, al mismo tiempo que gestionan los riesgos y garantizan la adaptación de su equipo humano a los nuevos entornos laborales.
Las empresas deben invertir en la adquisición de nuevas tecnologías y herramientas que permitan la implementación efectiva de la IA. Este proceso puede ser desafiante para aquellas organizaciones que no cuentan con experiencia previa en la adopción de tecnologías emergentes, lo que requiere un enfoque estratégico y una inversión sustancial.
La IA generativa está transformando la economía global y redefiniendo los modelos de negocio en diversas industrias. Sin embargo, para aprovechar al máximo estas oportunidades, las empresas deben estar dispuestas a enfrentar los desafíos para su adopción y aprovechamiento óptimo. Esto incluye no solo invertir en nuevas tecnologías, sino también en el desarrollo de su personal para que esté preparado para colaborar con la IA. Aquellas organizaciones que logren equilibrar la innovación tecnológica con una gestión eficaz del cambio estarán en una posición privilegiada para liderar la nueva economía impulsada por la IA.